Aro de Porta Bastón
c. 1970
Manuel Ñancuvil
“Cuando chico, cuando niño iba a la estación, a veces, para venir a la ciudad, venía en tren, iba y venía, y cómo hacían los cambios ahí, llegaba el jefe de estación en ese momento, o algún cambiador, y esperaba el llamado y luego sacaba de aquí de los staff, un bastón, y en ese tiempo no tenía idea qué era bastón ni nada, luego lo ponían en este aro y lo ponían a la pasada del tren o se lo entregaban por mano al maquinista o al ayudante. Y también a uno le llamaba la atención porque a veces el tren rápido no paraba en la estación chica, entonces venía el ayudante o el mismo maquinista con el aro en la mano, y pasaba a tirar o entregar el aro, y luego recepcionar el otro que estaba un poco más allá, a unos cuantos metros más hacia adelante”
Carlos Correa
“Me acuerdo cuando nos acercábamos a la estación y veíamos que este aparato estaba abajo, “¡fu!, nos vamos compañeros, nos vamos”, así que pasábamos por la estación, agarrábamos esto y seguíamos, en cambio, si estaba así, las dos arriba, “¡bu! compañeros, detenidos”, no sabíamos cuanto rato más íbamos a estar ahí po, con los trenes de carga, así que un bonito recuerdo esto”
Carlos Correa
“Esto tiene un significativo especial, para nosotros el personal de máquinas, porque esto acompañaba a esto, al bastón, porque, aunque estuviera puesto esto en el dispositivo que teníamos, donde colocaban esto, si estas dos cosas estaban arriba, no se podía pasar, en cambio si esta parte estaba abajo, significaba que nosotros podíamos seguir a la estación siguiente, esto era también como un seguro que nos daba seguridad, que también no venía nada del otro lado”